Llamado originalmente “Contrología”, debido a que es un método en el que prima el control de la mente sobre el cuerpo, luego adoptó el apellido de su creador: Joseph Hubertus Pilates, cuyo nombre hoy se conoce en todo el mundo. No tanto como su fascinante historia, que tuvo ribetes cinematográficos. De pequeño, Joseph fue débil y enfermizo pero también obstinado: gracias a sus ejercicios se convirtió en un adolescente deportista, más tarde en boxeador, estrella de circo e instructor de defensa personal. E incluso fue inspiración para destacados coreógrafos y bailarines de su época, como Mary Wigman (Alemania), George Balanchine (Rusia), Martha Graham (Estados Unidos), quienes aplicaron este sistema de ejercicios en sus clases de danza.
En su método, creado en el siglo XX, Pilates combinó sus observaciones sobre el movimiento de los bebés y los gatos; conocimientos sobre lucha, yoga, Tai Chi, meditación zen y gimnasia; y estudios de mecánica corporal y respiración. Más tarde lo perfeccionó en situaciones adversas: mientras fue internado en un campo de concentración nazi en Inglaterra (aquí se las ingenió para realizar movimientos en un espacio reducido) y años después, de regreso en Alemania, cuando trabajó en la rehabilitación de veteranos de guerra (de esta época data el uso de camillas y poleas).
Pilates creó un entrenamiento integral: practicarlo mejora la flexibilidad y la elasticidad muscular; aumenta la agilidad, la fuerza y la destreza; corrige malos hábitos de postura; reduce y controla los dolores de espalda; previene y rehabilita lesiones en los músculos; mejora el sistema sanguíneo; reduce estrés y la tensión. En definitiva: mejora la calidad de vida.
Y aunque tal vez las variantes más difundidas sean Pilates de suelo o con máquinas, el método presenta otras tantas. En esta nota te contamos cuáles son –desde las más difundidas, a las clásicas-.
Inferno Hot Pilates
Combina ejercicios de estiramiento a 35 grados de calor con secuencias de alta intensidad (no es 100% Pilates). Fue creado por una ex fisicoculturista húngara, Gabriella Walters, y desarrollado en Estados Unidos, donde fue instalado por la actriz Kate Hudson gracias a sus posteos en Instagram. Esta variante, tendencia mundial en fitness y furor en Argentina desde el año pasado, favorece la eliminación de toxinas a través de la sudoración y la pérdida de calorías. También reduce el riesgo de sufrir lesiones porque el calor ayuda a mantener protegidos los músculos y las articulaciones. No es apto para quien haya tenido antecedentes coronarios o de ACV.
Winsor Pilates
Actualmente es uno de los más difundidos. Fue desarrollado por Mari Winsor, instructora de pilates y ex bailarina. Su método consiste en unir el pilates moderno y una serie de ejercicios aeróbicos. Permite mejorar la fuerza central y la postura, pero la pérdida de peso no es uno de sus beneficios más importantes.
Pilates Mat o Sobre Colchonetas
Los ejercicios se realizan sobre una colchoneta, sin máquinas, aunque se pueden usar elementos como pelotas, bandas elásticas o aros. Su práctica suave y progresiva, siempre conectada a la respiración. Cada persona progresa a su propio ritmo.
Pilates con Máquinas
Es ideal para iniciarse en el método. Permite adaptar el ejercicio a la capacidad física de cada persona, ya que se puede controlar la fuerza que queremos aplicar en cada ejercicio.
Reformer. Es la máquina más conocida y difundida. Funciona con resortes que son resistencias (o cargas) de diferentes intensidades. Incorpora la técnica empleada en los ejercicios de suelo a un entrenamiento de mayor intensidad, ya que la variedad de ejercicios que permite son muchísimas (¡80!).
Cadillac. Es una cama que está elevada y tiene sobre ella una estructura de acero para colgar complementos. Aunque está diseñada para trabajar principalmente abdomen, piernas, pecho y caderas ofrece la posibilidad de trabajar todo el cuerpo. Permite aumentar progresivamente la dificultad de los ejercicios de manera segura y controlada.
Aquapilates o Hidropilates
Utilizando la resistencia natural del agua, las clases se desarrollan en piscinas de poca profundidad y, aunque no es necesaria una formación previa, es recomendable saber nadar. Los movimientos son más suaves y pausados y se mantiene el equilibrio con más facilidad. Ideal para personas mayores, que tienen algún problema físico o que no practican ejercicio con frecuencia.
En su método, Pilates combinó sus observaciones sobre el movimiento de los bebés y los gatos; conocimientos sobre lucha, yoga, Tai Chi, meditación zen y gimnasia; y estudios de mecánica corporal y respiración.