Los cambios sociales influyen en todos los aspectos de la vida y por supuesto que la moda no queda exenta. Una nueva forma de mostrarse y conceptualizarse ha llegado.
Hasta hace algunos años la moda estaba estructurada de forma piramidal y relacionada con un concepto social de búsqueda de status y distinción. Las tendencias se generaban desde las clases altas (la alta costura), bajando en forma vertical a través de la imitación y divulgación al Prêt-à-porter (prendas seriadas), llegando hasta la calle. Así se copiaban cartas de colores, texturas, recursos de costura y textiles; logrando que la producción seriada y el consumo alcanzara su máxima expresión.
Hoy la moda más allá de las pretendidas imposiciones de homogeneización de las grandes marcas, se ha vuelto horizontal y toma la calle como protagonista. Las mujeres siguen la moda pero de manera más libre. Usan lo que les gusta, con un look más a la carta y con ritmo propio. Dejando de ser algo superficial para convertirse en el espacio donde expresar la propia individualidad.
Todavía conviven dos sociedades diferentes. Por un lado la industrial, orientada a lo seriado, al consumo masivo, con modelos de personas estéticamente atractivas a cualquier costo. Y por otro lado una sociedad nueva, la digital, que tiene como sustento ideológico el cuidado de los recursos humanos, el planeta y la salud. Esta sociedad ha generado un nuevo ideal de belleza basado en la ética y la autenticidad. Así encontramos nuevos términos en la moda como: slowfashion, moda ética o moda sustentable.
Los cambios sociales junto con la crisis económica y el deseo de dotar de valor al diseño con creaciones más personalizadas; ha propiciado una nueva generación que impulsa las producciones de diseño de autor, que lucha por su identidad y que supera sus limitaciones para gozar de un mercado global (internet) que le da agilidad a estas nuevas estructuras.
Nos encontramos con un nuevo paradigma en la moda, que nos presenta la construcción del proceso de identidad de una manera más libre. Es mostrar quien sos y quien querés ser, desde tu propio lugar. La emancipación de los autoritarismo, la búsqueda de diversidad y la autenticidad de esta nueva sociedad han hecho que la moda actual se vuelva un fenómeno mucho más estético, social y cultural.
De la tiranía de las pasarelas se pasó a la multiplicidad del diseño, del hedonismo a la búsqueda de lo personal. Ahora, se viste la calle.
María Eugenia Cortés.